El actual presidente se fue como embajador a Canadá, ahuyentado por la mototaxi que amenazaba en censurarlo tras el destape de audios donde se presionaba al ex contralor para asegurar la construcción del aeropuerto de Chinchero, lo que mostraba también toda una red de corrupción que había desde el ejecutivo. La opinión pública no solo quería que Vizcarra deje de ser Ministro, sino incluso que renunciara a la vicepresidencia. 

El regreso de su exilio se dio porque se cumplió el objetivo de Keiko y la mototaxi, que era que PPK renuncie. ¿Por qué el Fujimorismo habrá querido bajarlo a PPK y dejarlo a Vizcarra? Cuando pudo acelerar y alcanzar la Presidencia a través de Galarreta como presidente del Congreso, ¿habría que hacerle caso a ese dicho que “en política no existen casualidades”?

Vizcarra antes de asumir la presidencia ha tenido que entablar una alianza con la fuerza que acaba de sacar a su antecesor, sino ni siquiera hubiese podido ingresar a Palacio de Gobierno. ¿Para qué exponerse a la vergüenza si en breve la mototaxi podía abollarlo? Es un hecho que la bancada de PPK no es su bancada. Hasta ahora retumban las voces de muchos congresistas que decían que Vizcarra renunciaría porque era un caballero y amigo de PPK.

Villanueva solo fue encargado de presentar el oficio de la vacancia, no significaba que APP o él tengan el poder para hacerlo. Y por supuesto APP y el fujimorismo acordaron que Vizcarra se convierta en presidente antes de presentar la vacancia, es imposible jugársela por un sucesor que en vez de aceptar el cargo, termine renunciando y cuestionando el proceso de vacancia, con la confianza de que Vizcarra reconocía el poder fujimorista en el parlamento, Keiko salía en un video respaldándolo.

Todo esto bajo la venia de la embajada norteamericana acostumbrada a intervenir en la crisis política de nuestro país.  Se caía uno de sus títeres y entraba a la cancha el suplente.   

Hoy algunos ingenuamente intentan decir que Vizcarra cumpla su rol histórico y lleve bien puesto los pantalones. No han aprendido que un neoliberal jamás será un mal menor. Vizcarra no quiere y no puede cerrar el parlamento, le debe su cargo a Keiko y sus secuaces, es asesorado por agencias gringas y ha planteado un referéndum para distraer a la población, atacando con ello a muchos sectores que vienen trabajando por una Nueva Constitución, solución real para cambiar el rumbo del país. Vizcarra juega en pared con los gringos y la Oligarquía a través de la CONFIEP para mantener intacta la dictadura neoliberal, con nuevos shows, intrigas y desengaños.

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